LOS CUATRO PODERES DEL MAGO

Conocimiento, valor, voluntad y silencio:

 

Estos son tradicionalmente los cuatro poderes del mago, y también las cualidades que necesita añadir a su habilidad para centrar la atención y concentrarse en algo.

 

Conocimiento

 

Es la voz de su sabiduría interior. Pero es un saber que, más que poseerse, como ocurre con lo que aprendió en la escuela, se vive o experimenta.

 

Valor

 

Cuando su propia verdad interior desafíe ideas y prejuicios con los que ha vivido durante mucho tiempo, necesitará valor para seguirla.

Voluntad

 

Es lo que le mantiene en el camino, permitiéndole rechazar las distracciones que podrían apartarle de éste.

 

Silencio

 

Es la habilidad para acallar el ruido de la mente, para alejar los pensamientos que no cesan de dar vueltas en su cabeza. Sin esa habilidad, no podrá escuchar su voz interior.

 

Alimente esas cualidades, recuérdelas. No necesita ni un escenario ni un momento especiales para hacerlo. Puede estar sentado en su despacho, ante el mostrador de una tien-da, esperando el metro... Simplemente, pregúntese:

 

«¿Me estoy escuchando a mí mismo?».

 

Recordar los cuatro poderes puede producir cambios profundos en su vida. De hecho, ésta es la primera parte de su entrenamiento mágico, y es muy importante. Sin embargo, sea práctico:

 

No espere demasiado, ni muy pronto.

 

Por ejemplo, puede encontrarse en el metro, camino del cine, y recordar los cuatro poderes. Quizá se dé cuenta entonces de que no es eso lo que quiere. En tal caso, resulta fácil bajarse y regresar a casa, ya que es usted el verdadero dueño de sus actividades. Sin duda, le será menos sencillo hacer lo mismo en el caso de que descubra que su trabajo no le interesa. Pero la toma de conciencia es siempre el primer paso en cualquier proceso de transformación.